Pc Portatil   

La mejor opción para trabajar fuera de casa

Hace ya más de un año tomé la decisión de dejar mi trabajo fijo en una tienda de mi localidad y ponerme a trabajar por mi cuenta. ¿El motivo? El embarazo de mi segunda hija y el hecho que los horarios comerciales de nuestro país son totalmente incompatibles con una vida familiar plena.

Mi cargo de responsabilidad en la tienda fue lo que me hizo tomar esta decisión. Como responsable, era la primera en entrar en la tienda y la última en salir. Eso significaba que si la tienda cerraba al público a las 21 horas, entre cuadres de caja y apagar las luces, salíamos a las 21.30 como mínimo. Muchos días, al llegar a casa cerca de las 22h, mi hija mayor ya se acostaba porque al día siguiente tenía que levantarse pronto para ir a la escuela. ¿Vida familiar de este modo? Ninguna.

Mucho me dijeron mis padres y mis familiares más próximos si me lo había pensado bien: dejar un trabajo fijo con la que estaba cayendo… Pero es que no tenía otra opción: o lo dejaba, o no veía a mis hijas en años o me perdía hitos importantes de sus vidas para dedicar la mía a clientes desagradecidos.

Así que eché mano de mi licenciatura en filología inglesa, y empecé a redactar y a traducir textos para clientes varios. De este modo, me organizo yo misma el trabajo, al cual dedico un mínimo de unas cuatro horas diarias (dependiendo del volumen que tenga para redactar o traducir – ya se sabe, la dura vida del autónomo; semanas con mucho trabajo y semanas que no tienes nada por hacer…), y puedo dedicarme a mis hijas todo lo que quiero y más.

Pero con lo que no contaba era con una hija llorona…

Sin embargo, yo estaba muy bien acostumbrada con mi hija mayor, que siempre ha comido y ha dormido muy bien. Pero nunca las segundas partes fueron buenas, y mi vida de freelance se está viendo obstaculizada por la pequeña que es todo lo quejica y llorona que no fue su hermana en su día.

Así que para poder concentrarme en lo que escribo y traduzco, tengo que salir algunos días de casa e irme a la biblioteca a trabajar esas cuatro horas. Es por ello que para mí es imprescindible contar con un buen pc portátil para poder llevarme el trabajo allá donde quiera. Ya sea en estos días en que tengo que marcharme de casa para trabajar (menuda ironía) o para usarlo durante el período de vacaciones estival, cuando nos marchamos al pueblo durante quince días (el autónomo no puede desconectar nunca del todo).

Así pues, si aún eres de los que piensa que tener un ordenador de sobremesa es lo mejor que te ha pasado en la vida, es porque aún no has conocido las múltiples ventajas con las que cuenta un ordenador portátil.